Me desnudaré de mi propia piel, para averiguar quién soy, sin que nadie logre reconocerme.
Me despertaré con el sonido de mis bostezos, ayunaré del quejido de mis tripas, enloqueceré al paso de la cordura.
Me ataré pecaminosamente de aquellos labios que me enseñan a rezar, para seguir remando hasta la orilla.

5 comentarios:
Tu poema transmite, pero de lo que transmite casi duele.
Doler?? Jo, pues entonces no transmite lo que queria. Yo lo intente cargar de un optimismo (que me define) sueperlativo, intuitivo y supermineralizado.
Pero veo que no.
Besos de taza de café con dibujitos de monos.
A ver si transmite que luchas por lo que quieres, pero vamos lo que yo entiendo es que estás dispiesto a que te duela también si es necesario para alcanzar la orilla por ejemplo lo de quitarse la piel ... Pero bueno alomejor no es eso...
besos de campo.
DISPUESTO NO DISPIESTO vaya cuadro de mujer.
Si, si, dispuesto estoy a que duelan. Si no serían esfuerzos, no?
Pero en el fondo mola hacerlos.
Besos de monedero vacio.
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