jueves, octubre 20, 2005

Hallazgos del Club (Redenciones)

Una vez más, haciendo ciberzaping, he encontrado un blog digno de (al menos) ser vitado.

RENDICIONES

un ejemplo:

Uno De Estos Días....

.... Me voy a liar la manta a la cabeza y el incendio de Roma va a quedar como una mariconada...



¿Dónde empieza la partitura del horror?

9 comentarios:

Tempus Fugit dijo...

Gracias por la reseña y el amable comentario, selenita.

Tu blog no está nada mal. Tiene unos aires de "estar al filo de todo", que me agradan.

Por cierto: Mi blog se llama "Rendiciones", no "Redenciones". ¡Líbreme Dios y la familia Ingels de redimir a nadie!, bastante tengo ya con lo que tengo, jajaja.

Un beso, chaval.

El Selenita dijo...

Joder, que mal, no? Jajaja ya lo cambio.

meditada dijo...

Oye que yo te ayudo a quemar lo que haga falta que siempre tuve ganas de ser pirómana...

Un beso de manguera.

El Selenita dijo...

En realidad era Tempus Fugit, pero si. tb he tenido ganas de quemar cosas.

Besos de cerilla de motel de carretera

Tempus Fugit dijo...

Pues nada, todos a quemar, como locos, seguro que se nos queda genial el "body".

Saludos de mechero bunsen de laboratorio.

El Selenita dijo...

El body y cualquier prenda que tengamos puesta....

Perdon por la gilipollez.

Besos de graciosillo arrepentido

Jorge Magano dijo...

Me siento ofendido por el último comentario de El Selenita. Cuando yo era pequeño, y él lo era aún más, quemé la cara a un amigo mediante el sencillo (y estúpido) procedimiento de echar alcohol a la vela que él acababa de encender. Desde entonces su otrora look de Tino el de Parchís fue sustituido por el de Freddy Krueger en la tercera parte. Perdí un amigo; él una vida de ligoteo desenfrenado.

No entiendo que permitan que gente como El Selenita se mofe de las desgracias ajenas que, aunque pretéritas, siguen pesando en la conciencia de aquellos que tienen la mala suerte de tenerla.

Saludos flambeados (jojojo, si vierais el salto que pegó...)

El Selenita dijo...

Bueno, al fin te he ofendido en algo. Yo que pensaba que era inpenetrable esa fachada lujuriosa, pedante y quevediana de la que tanto te jactas.
Ah, jaja, ah, jaja.

Si, queridos asiduos al club. El señor ultraista va marcando las vidas de todo aquel que conoce. A algunos de unas maneras muy raras. Y si no pregunten a los Furbys

El Selenita dijo...

O es Quevedeca?